En el corazón del hotel, nuestra piscina de agua salada te espera entre plantas y árboles que aportan privacidad y frescor. Camas balinesas, sofás y tumbonas invitan al descanso durante el día, mientras que al caer la noche el espacio se transforma en un acogedor chill out.
Con duchas y vestidores para tu comodidad, este rincón es perfecto para desconectar entre las 10:00 y las 20:00 horas.